I.
Aquí no se dice, se devela.
Los velos están hechos de polvo heracleo.
La negación del vacío que el signo es
Es su sombra o manto de símbolos que están a punto de ser.
Todo está quieto en su delirio que es el Gran Uno.
Como la rosa que es quietud contenida
Por el torbellino que ella misma es.
Si todo es una explosión, está en reposo
Dentro de la esfera del Gran Uno .
Esa esfera duerme
En el vacío que la engendra
Y con él gira.
II.
Por aquí pasa la sombra del decir adherida a su luminoso.
III.
Como los símbolos son genios
Se convierten en cualquier ente.
Han sido apaleados y torturados
Como lo hicieron con las brujas del aquelarre
Que son las vírgenes del palacio lunar del símbolo
Y por su luz deliran los cocuyos del verso.
IV.
Emanada del océano de vacío
En el principio la nada estaba olvidada de sí
Y para que fuese, para que llevare su toga imposible,
Se le hizo urgente cantar.
La nada canta con un estruendo
Para que Sol despierte o nazca de nuevo.
Sol no ha despertado del todo.
Delira en duermevela y Caos se llama su cítara.
Amar es situar en escena la ensoñación de Sol.
Se canta porque Sol no ha despertado del todo.
Eso ocurrirá
Cuando todas las luminarias
Lleguen a su máxima incandescencia.
Cuando eso vuelva a ocurrir
Sol enceguecerá
Pero seguirá danzando
Hasta que todo se apague otra vez.
Cuando duerme, Sol no sabe.
Cuando despierta,
Despierta cantando y sin darse cuenta.
Sol es la inconsciencia de los relámpagos.
En el sueño de Sol
Palpitan las cosas que están a punto de ser.
Sol es signo mientras duerme.
La nada rompe la cápsula que él es
Y los sistemas galácticos
Son los genios que despiertan.
Los planetas tienen la conciencia que les otorga la luz
Por la bestialidad del rayo.